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domingo, 17 de enero de 2016

MI EXPERIENCIA COMO ATLETA, LAS LESIONES Y LAS AUTOPOSTURAS DE LA RPG (REEDUCACIÓN POSTURAL GLOBAL).

Hoy no os voy a hablar como fisioterapeuta sobre la RPG sino como practicante.

Tras un parón de varios años (bastantes) por mi maternidad, reinicio mi andadura deportiva como atleta veterana en la modalidad de velocidad, en una prueba tan dura y exigente como son los 400 metros lisos; ¡hay que poner en marcha de nuevo la maquinaria!

Al principio de temporada hacemos más carga de trabajo para luego ir afinando de cara a la competición.

Ayer durante el entrenamiento quise ponerme a prueba porque necesitaba tener sensaciones e hice al 100% unas series de 80 m que debería haber realizado al 80% de intensidad.

En la última noté un tirón en el isquiotibial  del muslo izquierdo (si hubiera hecho las series al 80% ésto no hubiera ocurrido) y como atleta cabezota que soy, continué la serie hasta el final.

Por la tarde no podía flexionar la pierna por el dolor (limitante, más que intenso).

Esta mañana seguía con las mismas molestias así que me puse manos a la obra y tiré de todo mi arsenal terapéutico (automasaje con pelota, tens, estiramientos, RPG,…)

Quiero destacar las autoposturas de la RPG, pero sobre todo dos en especial que son fabulosas “la bailarina “ y “la rana en el aire”.



Lo bueno de las autoposturas es sentir y entender pare qué se hacen. Sentir las retracciones (acortamientos) musculares y ver cómo, poco a poco, a medida que avanzamos en la postura, van cediendo y va desapareciendo el dolor.

Hoy he iniciado la sesión de RPG con la postura de “la rana en el suelo” para estirar sobre todo mi psoas- iliaco y adductores pubianos. He continuado con la postura de “la bailarina” donde he sentido una gran retracción en mis isquiotibiales y mucha tensión lumbar; y par último he trabajado la postura de “la rana en el aire” (fabulosa postura para descargar todo el miembro inferior (adductores, isquiotibiales, gemelos, músculos del pie,…).

El resultado final ha sido increíble, aporte del bienestar y la relajación general ya que se trabaja con la respiración (inspiraciones cortas y espiraciones muy largas) , liberando así muchas tensiones aumentando nuestro nivel de endorfinas.

Os escribo el mensaje que he transcrito a mi entrenador nada más terminar la sesión:

“La autopostura de la “bailarina” es fabulosa pero la “rana en el aire” se supera; la sensación después de realizarla es de liberación total desde la planta de los pies, gemelos, isquiotibiales, glúteos, toda la espalda hasta la base de la nuca. Ahora siento las piernas más largas y descargadas. Infinitamente mejor que con un masaje de descarga.”

Ya que toda actividad deportiva es concéntrica y tiende a acortarnos, sería aconsejable practicar varias posturas una vez por semana, consiguiendo así tener unos músculos largos y fuertes, previniendo de esta forma lesiones en el futuro.

                                                                           

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